El Gobierno de Almeida se queda solo en su postura respecto al Rastro
0REDACCIÓN 10/09/2020 11:22
Madrid, 10 sep (EFE).- El Gobierno municipal de José Luis Martínez-Almeida está solo en su postura respecto al Rastro, como exhibió ayer el pleno del distrito de Centro, donde no lograron apoyo de ningún grupo a su proposición para reabrir el mercadillo con seguridad para evitar contagios y a pesar de que autoenmendaron su propuesta.
La oposición afeó que el concejal de Centro les hiciese votar en medio de la negociación con los vendedores ambulantes y que llevase un texto no consensuado con los vendedores.
Pasadas las diez de la noche, Más Madrid, Vox y PSOE rechazaron la proposición del concejal ‘popular’ José Fernández, responsable del distrito Centro y exigieron que el Ayuntamiento alcance un pacto con los vendedores.
De nada sirvió la autoenmienda del Gobierno municipal, que eliminó la propuesta de reabrir el mercadillo en cinco zonas diferenciadas y se limitó a plantear que el Rastro se ubicase en un emplazamiento «que cumpla con condiciones higiénico-sanitarias».
Vox afeó la presentación de la proposición “en mitad de una negociación” y pidió contar con el criterio de los vendedores. el PSOE acusó al equipo de Gobierno de buscar hacer el “aval” de los grupos a su “desgobierno” y Más Madrid acusó a PP y Cs de poner “piedras” al diálogo al buscar un posicionamiento del Pleno cuando siguen las conversaciones.
El concejal de Centro rechazó las críticas de los vocales vecinos y defendió que el Consistorio se ha reunido hasta en siete ocasiones con los vendedores, aceptando el aumento de los puestos hasta el 50 % y presentando presentó tres propuestas, mientras que los vendedores ambulantes, representados en su mayoría por la Asociación El Rastro Punto Es, mantuvieron la posición para que volviesen la mitad de los comerciantes a su ubicación habitual.
Hasta el viernes, cuando los comerciantes enviaron una nueva propuesta donde se proponía que el perímetro fuese el habitual del Rastro, un contorno marcado por los edificios, que Fernández agradeció y ha trasladado ya a la Comunidad de Madrid y a los técnicos municipales para que analicen si es viable.
El concejal defendió asimismo que su proposición era “una declaración política de intenciones, con un único objetivo, que la propuesta que abra el rastro tenga condiciones de seguridad y sanitarias” pero no logró mover a la oposición de su negativa.
Pese a que sigue negociando, reiteró que el “problema» es que el Rastro «no puede ser en la huella original porque no se cumplen las distancias”, aunque el Consistorio se compromete a retomar el mapa histórico del mercadillo cuando finalice la crisis sanitaria. Además, acusó a los vendedores de decir “falsedades” como que el Rastro se quiere privatizar.
Antes de la votación los vendedores ambulantes se manifestaron frente a la Junta de Distrito, acusando al Ayuntamiento de dejación para no reabrir el Rastro pese a que lleva seis meses sin actividad y calificando de “humo” el anuncio de la suspensión de la tasa de los mercadillos. EFE
el problema es que el ayuntamiento de madrid piensa que los visitantes del rastro van a ser los mismos ,en numero,ESO NO ES ASI ¿CUANTAS PERSONA CREE QUE PASARAN POR EL RASTRO ,DESPUES DE LOS PRIMEROS DOMINGOS,Por favor,tan dificil es pensar?